Yo más que tú en todo

No os libráis de mis weekly posts, señoritas y señores. Sé que en estas semanas he estado un poco pesada con el tema de mi nuevo libro, «Este virus es una ruina», pero es que estoy muy emocionada por lo que he he conseguido y muy orgullosa del resultado final, y he querido compartirlo con todo el mundo. Así que os pido perdón por la pesadez y la insistencia. No os preocupéis, os dejaré en paz por unas semanas, jajaja.
Pero hoy no vengo a hablar de mi libro, hoy os quiero hablar de un tema…. quiero decir gracioso, pero no sé si es gracioso; es más bien curioso. Vamos allá.
Este post lo he querido redactar desde hace tiempo, pero con la mierda de la promoción del libro me he distraído. Hace unas semanas redacté el post:
Y muchas personas me escribieron o me llamaron para contarme sus fracasos, sus cagadas, sus desgracias, y lo más gracioso de todo esto (ya, ya, las desgracias no son graciosas) fue que cada persona, inconscientemente, competía por promocionar todos sus desastres. Si yo decía, por ejemplo, «Me han despedido», alguien decía, «Pues a mí no solo me despidieron, sino que también tuve que indemnizar a la empresa por irme»; o yo decía que me duele la pierna, otra decía, «Pues a mí me van a amputar la pierna», jajajajaa. No sé si estáis captando lo que quiero decir. Y aquí viene lo mejor, al final no lo decían exagerando ni promocionando, realmente son las historias de sus vidas. Ahí es cuando te das cuenta de que cada persona tiene sus mierdas escondidas, sus sufrimientos diarios con los que tienen que lidiar. Al final, si nos ponemos a comparar, no hay mierda mejor o peor que otra, son mierdas conjuntas que cada uno tiene que afrontar.
Y me alegra que haya tardado en redactar este post porque me he dado cuenta de que no solo competimos por resaltar lo malo, sino también lo bueno. Os pongo ejemplos: digo «Mis hijos tienen buenos trabajos», y alguien dice, «Pues los míos tienen excelentes trabajos y ganan millones de euros»; o yo digo, «He publicado mi primer libro», y te dicen, «Eso no es nada, yo ya he publicado 10 bestsellers», jajajaja. Como podéis ver, tanto en lo bueno como en lo malo, todos queremos sobresalir, destacar. Y esto me hace pensar que si tan bueno tenemos tal malo será.
Y por hoy es solo eso que necesitaba deciros. Ah, y ¿habéis visto mi nuevo libro? jajajajajajaa. BROMA… jajajajajaaa. Hasta la próxima, señoritas y señores, seguid acumulando experiencias, tanto las buenas como las malas. Estoy aquí para escuchar.