Las Crónicas del Cuidador: Nietos

No me gusta planificar mucho (antes me encantaba) por lo cual no voy a decir que esta en mi penúltima crónica, pero puede ser. No porque no tenga mucho más que contar del tema, pero porque creo que he contado pequeñas piezas de todo que solo necesitan ser encajadas y desarrolladas en cada una de vuestras mentes. Por lo cual empiezo hoy lo que creo que acabaré muy pronto. Esta crónica no sabía muy bien como encajarla, pero la veía muy necesaria, espero que os guste.

Hoy en las crónicas del cuidador quiero hablar de «los nietos» hasta ahora os he contado como yo lidero con el cuidado de mi madre y aunque menciono a mis hijos de vez en cuando no he hablado de ellos en profundidad. Si es difícil para mí las responsabilidades y el cuidado de mi madre imaginaros lo que es para mis hijos. Ya no tan adolescentes ellos son perfectamente conscientes del estado de mi madre, pero a la misma vez son muy conscientes de su propio estado y ese estado es «vamos de fiesta», «tengo que estudiar», «la abuela me molesta», «No quiero ser responsable». Aquí es cuando empieza el dilema. Por una parte, yo les entiendo ya que son jóvenes y tienen que vivir su vida, pero por otra parte pienso que los abuelos son parte de la vida y hay que respetar y cuidarlos.

Tengo que decir que, aunque ha sido un poco de pelea día a día mis hijos han estado a mi lado durante todos estos años, gracias a ellos he tenido la libertad de poder hacer alguna escapadita de vez en cuando y poder desconectar. Creo que no son conscientes de la importancia de cuidar a una persona mayor, no son conscientes de todo lo que están aprendiendo, no se dan cuenta que, aunque piensen que están perdiendo tiempo, realmente están ganando carácter y aprendiendo empatía y responsabilidad.

La mezcla abuela nietos algunas veces es graciosa ya que ella piensa que son o sus hijos, primos, tíos (cada día son alguien diferente para ella), mi hijo le encanta seguirle la corriente y se hace pasar por quien ella diga quién es. Mi hija, aunque es un poco más fría realmente creo que tiene ese sentido materno y rechaza el acercamiento, pero su consciencia la puede y enfadada o no hace siempre lo correcto.

Mi madre me ayudó a cuidar de mis hijos cuando eran pequeños y ahora ellos hacen lo mismo. Estoy muy orgullosa de el hombre y mujer en que se han convertido y espero que cuando yo sea una viejecita mis nietos (si tengo alguno) cuide de mi con el mismo amor que lo hacen mis hijos.. Tendremos que esperar a ver…