Es imposible que me aleje de mi escritura, como la danza es una de esas cosas que me ayuda sentirme libre, me da esperanza, me desahoga, me da paz y me ayuda ha afrontar lo que ha pasado, está pasando y lo que está por pasar. Así que comienzo unas nuevas crónicas no porque quiero si no, porque lo necesito. Los que sois seguidores de mis crónicas sabéis que estas son las sextas. Todo comenzó con Las Crónicas de Este Virus es una ruina, continué con Esta vida es un reto, siguiendo con Fragmentos de Nuricoco, y después con Nuricoco sin Filtros y las últimas crónicas las de Nuricoco del Ayer. Así que si no has leído ninguna, pienso que es muy importante ponerte al día antes de empezar estas.

Como todo en mi vida lo empiezo y lo acabo cuando me sale del xixi, porque no hay nadie mejor que yo misma para saber cuando hay que hacer las cosas, no he sido una de esas personas que le gusta que la manden, soy más bien mandona. Siempre he tenido el mando, me gusta ser un líder y pienso que lo hago bien (hasta ahora no he tenido muchas quejas jaja).

Cuando finalicé las últimas crónicas pensé que ya no tenía mucho más que contar (a ver, tengo muchísimo que contar, pero temas del pasado por lo que sea en este momento no me apetecía mucho contar, ya vendrán otros tiempos que tenga más ganas). Cuando empecé mis primeras crónicas pensé que me leería todo el mundo y las redactaba cada día con amor y esperanza que lo que estaba contando llegara a muchas personas y que con lo que contaba lo pasarán bien o aprendieran algo, pero con el tiempo y con mis segundas crónicas, tercereas etc, me empecé a dar cuenta que no muchas personas las leían y que en realidad estaba redactando para mí misma y con ese sentimiento iré redactando estás nuevas crónicas, un diario privado para mí pero abierto al mundo.

La idea de estas nuevas crónicas es contar mi día a día al cuidado no solo de mi madre, pero de mis hijos, yo solita, madre soltera con pocos recursos económicos y familiares. Mostraros lo bonito y feo de todo, mis días buenos y mis días malos, contaros todo desde dentro. No hubiera pensado que esto fuera un tema específicamente interesante pero el pasado 24 de junio publiqué un video en mi canal de Tik Tok Nuricocome (sí, sí tengo canal de Tik Tok soy muy moderna joder) de mi madre donde la hacía preguntas de quien era, quien era yo, donde vivía etc  y mi sorpresa fue cuando ese video se convirtió en viral con al día de hoy 2.6 millones de visualizaciones y más de 5000 comentarios.

Muchos de los comentarios son positivos, hablando de que gran hija soy, que bien la cuido, que qué pena, que la cuide mucho, muchas personas comentando que tienen a una madre, padre o abuelos en la misma situación, muchas personas dándome ánimos, muchas diciendo lo difícil que es etc. etc.. y otros no tan positivos (que por suerte Tik Tok los esconde para que los tengas que aprobar (mi hija fue la que me lo dijo, yo hasta el momento pensé que eran todos positivos).  Estos comentarios son de personas que me recriminan por interrogar a mi madre, por exponerla y dicen que soy mala persona e hija.

La cosa es que me di cuenta de que no soy la única en esta situación pero también de que realmente lo que estoy haciendo es difícil, no lo había ni pensado, yo vivo y hago las cosas como me llegan, no pienso si son felices, tristes, fáciles o complicadas. Siempre he afrontado todo lo que me viene paso a paso. Desde este video viral he decidido hacer más Tik Toks con mi madre donde muestro nuestra felicidad, lo bien que lo pasamos y nuestro día a día bueno o malo. Me he dado cuenta que lo pasa muy bien y la entretiene, le gusta verse con filtros y lo más importante pasar tiempo conmigo.

Así que hoy os doy la bienvenida a esta nueva aventura que estoy segura será muy divertida, triste, frustrante y todo lo que pueda ser una vida normal y corriente con cosas no tan normales y corrientes.