El glamour del ayer

Estás crónicas me están costando más de lo que pensaba por varios motivos. Primero, no tengo tanto tiempo como antes y segundo, ciertos recuerdos como dije en mi última crónica mejor dejarlos en el olvido. Pero como no quiero defraudarme a mí misma (que a vosotros no es que me de igual, pero quiero quedar bien con myself) voy a intentar ser más constante. Hoy he elegido una foto que me recuerda mucho a mi época glamurosa (sí, lo sabéis me encanta el glamour), espero que os guste.
Si fuera por mi viviríamos todos en una película de blanco y negro del viejo Hollywood, cuando los hombres eran caballeros y las mujeres damas. Donde la belleza, el bien vestir y una buena copa de champan estaban al orden del día. Donde podías escuchar la voz de Billie Holiday de fondo y oler el perfume de Chanel nº5 por los rincones de la ciudad. Ahí sería yo feliz..
Ok, Nuria, despierta y vuelve a la realidad.. El glamour forma parte de mi ser, es mi esencia y aunque no lo pueda vivir con tanta intensidad hoy en día vive dentro de mí. Durante mi juventud he tenido la suerte de poder disfrutar de situaciones mega glamurosas y estar al lado de personas elegantes y educadas. En la foto que he elegido llevaba puesto uno de mis vestidos favoritos (lo sigo teniendo, una de las pocas piezas que sobrevivió las mierdecitas del trastero que mi hermano decidió tirar a la basura). Fue una sesión de fotos gracias a mi amigo Rodney Ray (ahora un fotógrafo de renombre que vive en Los Ángeles). En ese entonces estábamos en Miami (principio de los 90) el, un fotógrafo recién llegado a Miami y yo una niña con ilusión de vivir del glamour (no me fue tan bien).
Durante esta época bailaba como gogo en Club Nu, una de las discotecas más famosas de ese entones y a la vez buscaba mi lugar en el mundo. Era un alma libre (siempre lo he sido) y vivía día a día. Iba de fiesta en fiesta… fiestas en yates, fiestas en mansiones, fiestas en Brickell Avenue. Tenía amigos con un poder económico bastante alto (el mío nunca lo ha sido) y tuve la oportunidad de disfrutar de algunas ventajas como conducir coches como Porsche, Jaguar, Ferrari, Mustang, DeLorean o ir como pasajera en Rolls- Royce, Bentley y muchas limosinas.. Disfruté todo lo que pude y siempre fui agradecida y consciente de mi suerte y de la generosidad de las personas que me rodeaban.
No soy materialista, simplemente me gusta el glamour, tuve muchas oportunidades de quedarme con ese estilo de vida ya que no me faltaban propuestas (tampoco soy prepotente ni pretenciosa) pero, aunque el glamour era lo que más deseaba otra fuerza dentro de mí me llevó a otro lugar. Me alejé de ese mundo porque quería que ese mundo fuera hecho por mí y no dado a mí. A lo largo de mi vida he intentado crear mi propio glamour, pero nunca a esos niveles y como soy muy blanco y negro decidí separarme totalmente de este aspecto ya que estaba segura jamás alcanzaría mis deseos y estar tan cerca y no poder duele más que estar lejos y poder.
El glamour siempre vivirá dentro de mí y ahora lo vivo de otra manera. Tengo glamour cuando limpio la casa, tengo glamour cuando recojo la mierda del perro, tengo glamour cuando ando con mi tobillera, en fin, que jamás perderé él glamour.
Richard
Como siempre MUUUUUUUUUUY interesante , pero por favor Nuria, es Porsche P O R S C H E!
nuricoco
sí y DeLorean (con L mayúscula) es que eres muy rápido y no me das tiempo a rectificar jajaja
Maria Araujo
Tu siempre has sido bella, sofisticada y glamorosa.
El glamour nace con las personas, viene intrínseco en su DNA , por más que pretendas estudiar y practicar…!!!!!!! Si no viene de nacimiento, estarás copiando estilos, modelos, comportamientos.
Puedes tener el plumero en la mano y ser la mejor limpiadora que existe.
Sigue siendo tu misma… ,
nuricoco
ays gracias mi amiga miss you