Convivencia Coronavirus DÍA 75 martes, 26 de mayo 2020

No sé si os pasa que habéis perdido un poco la noción del tiempo, todo es un poco extraño en este momento y da igual si es lunes, martes o domingo… Pues muy mal, cada día debe ser diferente, debéis hacer algo distinto todos los días. Pero no voy a regañaros, mi amigo Isra me dijo que no os regañara y que mejor predicara con el ejemplo, y eso es lo que intento hacer todos los días. Por suerte o desgracia, a mí me pasan cosas diferentes todos los días. Muchas veces ni siquiera tengo que pensar en qué hacer de manera diferente, ya que algo sucede… jajajajaja… Hoy no es una excepción, así que os cuento lo que me pasó…

Esta mañana me desperté muy temprano (bueno, temprano para mí, no me juzguéis) y escuché de nuevo al pajarito (no recuerdo si os lo conté el otro día). Bueno, era como «pio, pio, pipi pio» (no comencemos, describir los sonidos es muy difícil, déjadme en paz, ya que siempre los escucho en mi cabecita). Y pensé… ¿Será el mismo pajarito al que le dejé comida el otro día? Y, efectivamente, ahí estaba (super mono), posado en el ventanal de mi galería, mirándome sin asustarse. Empezó a comer el pan que le había dejado y le dije: «Buenos días», y él «pio, pipi pio», y yo respondí: «Pues buenos días a ti también». Me imaginé como Blancanieves con sus pajaritos, pero en lugar de vivir con enanitos, vivía con Gremlins… En fin, desayunamos juntos y luego se fue… Espero que vuelva mañana… (quizás deba madrugar más).

Por lo demás, el día ha transcurrido y llegó la hora de la entrevista con mi amigo Rafael Llopis, lo pasamos muy bien… Me hubiera quedado horas hablando con él.

Y así, el día se ha pasado volando. Me he dado cuenta de que todas las mañanas me doy ánimos a mí misma y funciona… jajajaja.

Reflexión del día: La educación es algo por lo que doy gracias a mis padres por inculcármela una y otra vez, al igual que el agradecimiento y la generosidad. Son tres cosas que valoro mucho y creo que las practico (o al menos intento hacerlo) a diario. También son cualidades que valoro mucho en otras personas. A menudo me doy cuenta de que algunas personas carecen de alguna de estas cualidades, y no las juzgo (ya hablamos de esto en otra reflexión), pero hoy en día prefiero rodearme de personas que compartan mis mismos valores.

«Si algo no te hace sentir bien por dentro, aléjate.»