He llegado al cumulo de todo, eso que dices (bueno tu cuerpo mucho antes dice) ¡STOP! Aunque soy Super Woman y lo sabéis, también soy humana.. sí, ya, ya… pensabais que era una diosa majestuosa que todo estaba en su poder y que todo con ella era posible y que todo de color de rosa (mejor el lila, me gusta más). Pero, no es así señores y señoritas, La Nuria está hasta el x**** y necesita poner orden AGAIN a su vida y hoy os cuento why.. Are you ready?

Este año además de la pandemia de covid en mi vida ha habido la pandemia del regaño (contra Nuria).. Sí, es una pandemia súper peligrosa y parece ser contagiosa ya que salta de uno a otro y todos se ponen de acuerdo para atacar con todas sus fuerzas. Es un virus vivo en seres queridos pero invisible a ellos mismos, no se dan cuenta que contagian. Y no hay mascarilla y vacuna que curen este mal que poco a poco creo que me está matando.

Sé lo que estáis pensando «Qué exagerada», «¿De qué c*** habla Nuria ahora? de verdad que cada vez está más loca», «No me entero de nada».. Calma people que ahora lo explico todo.. Los que me vais siguiendo (que cada vez sois más) sabéis un poco mi percal.. La madre con demencia, dos adolescentes, el perro, el novio en Madrid, el ex en China, el curro, los proyectos, las gestiones legales, médicos.. la lista es interminable (como me imagino igual para muchas más mujeres como yo). Todo esto lo llevo yo solita con poca o ninguna ayuda ya que parece ser que he acostumbrado mal a mis hijos y no me ayudan nada.. Y aquí es cuando empieza la pandemia del regaño..

Mis hijos son muy exigentes y no entienden que no llego a todo, simplemente, llévame aquí, allá, cómprame eso cómprame lo otro.. Esta semana mi chico se quedo con nosotros casi una semanita entre semana (la primera vez que convive con nosotros durante una semana «normal» de nuestro día a día laboral). Primera tarde noche, salimos a cenar y a los 10 minutos llama mi hija «MAMÁ, MAMÁ QUE SE ME HA CAIDO EL ESPEJO ENCIMA Y SE ME HA ROTO» (la segunda vez en 2 semanas) y yo «¿Pero estas bien?» y ella «MAMÁ, AHORA TENDRÉ 14 AÑOS DE MALA SUERTE, VEN A CASA» yo (en voz muy tranquila) «Hijita mía estoy cenando, ahora voy»... Al llegar a casa nos encontramos el espejo roto en mil pedazos, mi hija llorando, mi hijo entrando por la puerta y mi chico diciéndole «baja al perro y tira la basura» y mi hijo «Eh, eh qué ya voy tío», mi madre preguntado que quien éramos. Segundo día, por la mañana, que si no quedan galletas, que sí llegamos tarde, que si «Me ha bajado la regla dame un tampón».. Por la tarde.. «¿Quién se queda con la abuela?» » Yo no, tengo futbol», «Yo tengo plan»….Bueno, creo que no tengo que detallar todo ya que me imagino vosotros tenéis más de lo mismo en casa (bueno, no todos que lo nuestro es una casa de locos)..

Lo que quiero explicar es que la pandemia de regaño viene cuando mis hijos me regañan por no darles todo lo que quieren, mi chico me regaña porque dice que les doy todo lo que piden, mis amigas me regañan porque dicen que debo ser más estricta, los conocidos me regañan porque no entienden porque hago lo que hago, y se contagian uno a otro y da igual lo que haga me contamino y aunque intente protegerme, defenderme, me quedo indefensa, cansada, debatida, insegura y se me quitan las ganas de todo…. Redacto esto a cachos.. Me he levantado a hacer la cena, poner una lavadora, recoger la cocina, hablar con mi chico (ya fuera de la casa de locos, me imagino contento).. Redacto y hago una tarea, redacto un poco más y otra p*** tarea.. Son las 00:12 y los que estáis leyendo me preguntaréis «¿Por qué lo haces?» J*** en mi crónica pasada respondí el Para Qué, el por qué es más de lo mismo, no tengo que hacerlo, quiero hacerlo, necesito hacerlo..

Espero esta pandemia de regaño tenga una cura, espero que el que esté leyendo esto pueda entender y hasta a lo mejor verse reflejada (no digo reflejado porque vamos a ser honestos pocos reflejados hay). Ah.. me regañaron también por regañaros por no dejarme comentarios, y tienen razón, no todos utilizáis redes sociales o sois activos en internet, pido perdón por los regaños (veis contagiada estaba). No os voy a pedir nada, sólo daros las gracias por leer.. Aún me sorprende cuando personas de repente me dicen «te leo» y sobre todo como la semana pasada me dice mi hijo «Mamá que mis amigas te leen» y una de ellas que vino a casa me dice.. «Te leo todas las semanas y aprendo mucho»...

La peor pandemia es la que creamos sin saberlo y la que sólo nosotros tenemos la vacuna